lunes, 10 de abril de 2017

Las nuevas formas de represión de los cuerpos de seguridad venezolanos

Luisa Quintero/ @l_andrequintero Foto: Cortesía Juan Barreto/AFP 
En las manifestaciones de los días 6 y 8 de abril se evidenció la utilización por parte de la Guardia Nacional y la Policía Nacional Bolivariana de bombas lacrimógenas vencidas desde 2015

Las manifestaciones convocadas por la Mesa de la Unidad Democrática durante el mes de abril han dejado en evidencia nuevas facetas de los cuerpos de seguridad para el control de protestas: el uso de lacrimógenas vencidas, que también son lanzadas desde los helicópteros, o hacia las piernas y pecho de los manifestantes.

En las manifestaciones de los días 6 y 8 de abril se evidenció la utilización por parte de la Guardia Nacional y la Policía Nacional Bolivariana de bombas lacrimógenas vencidas desde 2015, debido a la denuncia de diversos diputados a la Asamblea Nacional como Juan Andrés Mejía o José Manuel Olivares, quienes recogieron evidencias en los sitios de las protestas.

Otro hecho que causó alarma sobre los manifestantes fue la presencia de un “gas rojo” junto al uso de lacrimógenas en la avenida Libertador el 8 de abril, hecho que fue denunciado por el alcalde de El Hatillo, David Smolansky.

Por este hecho, el presidente Nicolás Maduro solicitó una investigación contra el alcalde por denunciar el uso de armas químicas para justificar una intervención de fuerzas extranjeras.

La protesta de este 10 de abril convocada por la Unidad dejó dos nuevos modos de represión: Las bombas lanzadas por la GN fueron al nivel de piernas y pecho (evidenciado en las agresiones sufridas por la diputada Delsa Solórzano y los fotógrafos Román Camacho y Diógenes Colina), y lacrimógenas lanzadas desde el helicóptero de la PNB.
Niveles de fuerza

La ex comisaria de la Policía Metropolitana de Caracas, Yajaira Castro de Forero, explicó que a los funcionarios de cuerpos de seguridad se les enseña el uso de cinco niveles de fuerza para evitar el daño de los ciudadanos y conseguir la misión de forma satisfactoria.

Los primeros niveles son de negociación y despliegue táctico de los funcionarios, explica Forero, quien también es parlamentaria. “La policía no hace uso de ninguno de estos niveles, pasan directamente al uso de la fuerza para reprimir a los manifestantes pacíficos. Hoy apenas tocamos la autopista fuimos reprimidos por la PNB”.

Además, Forero resalta el hecho de que las bombas sean lanzadas a las extremidades y torso de los ciudadanos. “Una bomba lacrimógena es expulsada con fuerza por lo que puede ocasionar fracturas y hasta la muerte dependiendo de lo cerca que sea lanzada, al igual que las escopetas de perdigones. Ya vimos el año pasado como le vaciaron un ojo a un activista en Barinas y como mataron a Geraldine Moreno. Estas armas son potencialmente letales”.

La diputada también rechaza el uso de lacrimógenas para lanzar bombas lacrimógenas hacia los manifestantes. “Esto es muy grave. Debemos recordar que estos objetos van con fuerza y al caer desde gran altura pueden ocasionar las muerte ipso facto a cualquier persona”.

Debemos rechazar el uso desmedido de la fuerza policial pues están lesionando los derechos humanos de los manifestantes y son crímenes que no prescriben, indicó la ex comisaria. “Una de las cosas que te enseñan es a verificar la dirección del viento al momento de lanzar las lacrimógenas, evaluar si hay clínicas, residencias o kinders cerca. Hoy lanzaron bombas a la clínica donde estaba Delsa Solorzano y tuvieron que trasladar a un niño de un mes por asfixia producto de los gases”.

Por su parte, el Defensor del Pueblo Tarek William Saab indicó a través de su cuenta en Twitter que mantiene comunicación con las máximas autoridades para “evitar” el uso excesivo de la fuerza en control de las manifestaciones públicas, además, condenó el lanzamiento de “objetos contundentes” desde el aire para dispersar las protestas.
Fuente: TalCualDigital

No hay comentarios:

Publicar un comentario