OCARINA ESPINOZA | EL UNIVERSAL
Aunque millones de bebés nacen en el mundo a diario, no es tarea fácil asegurar una gestación perfecta y un nacimiento completamente sano. La futura madre y el feto en desarrollo deben pasar juntos por pruebas recomendadas por los especialistas para que el resultado sea el esperado.
Una vez que nace el bebé, la tarea no ha terminado. Existen otras recomendaciones médicas de exámenes que procuran un diagnóstico que solo si se hace temprano permite la cura de los recién nacidos y el desarrollo de una vida de calidad.
Para la ginecobstetra Ana Lara, lo ideal es una consulta "preconcepcional" para evaluar a mamá y papá, pero muchas veces ese no es el caso.
PRIMER TRIMESTRE
Según Lara, quien trabaja para Aquamater y la Maternidad Concepción Palacios, los tres primeros meses son los más importantes porque se forman todos los órganos. "Luego de evaluar la matriz y los ovarios, se piden una batería de exámenes que varían de acuerdo a la persona. Debe hacerse una evaluación completa de hígado, riñón, tiempos de coagulación y tipo de sangre de la madre, prueba de HIV, despistaje de hepatitis E y B, toxoplasmosis, rubeola y citomegalovirus".
Hay que empezar a suministrar ácido fólico tempranamente, señala, porque previene malformaciones.
SEGUNDO TRIMESTRE
Para el segundo trimestre se recomienda la llamada "prueba combinada": un eco, con "translucencia nucal", cuyo objetivo es la detección de anomalías fetales. "El examen puede mostrar síndrome de Down u otro tipo de alteración genética en el feto".
Si la mujer llega al médico con 12 semanas o más de embarazo y no da tiempo de realizar las pruebas anteriores, se aplica la denominada "prueba triple", que toma una muestra de sangre para medir las hormonas. Si están alteradas puede haber malformaciones. Si alguna de estas pruebas asoma sospechas de síndrome de Down, la recomendación es realizar la amniocentesis.
Después del primer trimestre se debe iniciar la ingesta de calcio y hierro. "El calcio es sumamente necesario porque aunque la embarazada tenga una dieta balanceada, necesita suplementos".
El calcio se utiliza para la formación de los huesos del bebé que durante los 9 meses están creciendo. "Es incluso necesario para amamantar. Muchas veces la gente olvida el calcio en esa etapa y puede generar osteoporosis en la madre".
En este momento es recomendable hacer la citología. La ginecobstetra señala que hay miedos ante la posible pérdida del bebé con un examen de este tipo pero, además de no existir tal riesgo, se trata de la única prueba para determinar cáncer de cuello uterino o infecciones que puedan producir complicaciones en el parto.
En las 20 ó 24 semanas de gestación se sugiere un eco morfológico nuevamente, para despistaje de malformaciones. "No se trata del eco 3D. En este caso se ve la estructura del feto, el sistema nervioso central, los riñones...". Lara asegura que este eco, combinado con una prueba triple, garantiza en 99% que el bebé está bien.
Entre las 24 y 28 semanas es oportuno el descarte de diabetes gestacional. "Este padecimiento hace que los bebés tengan un tamaño exagerado, se puedan quedar atascados en el parto y predispone a la obesidad infantil. Puede haber hipoglicemia porque al nacer, el bebé deja atrás los niveles de azúcar a que estaba acostumbrado en el vientre de la madre".
En la mamá crea hipertensión, aumento de peso, preeclampsia y problemas circulatorios, además de predisponerla a infecciones. "Si hay fuertes antecedentes de diabetes, este examen puede hacerse incluso antes", apunta Lara.
TERCER TRIMESTRE
La especialista señala que al igual que el primer trimestre, el último es complejo para la madre y el feto. "En esta etapa es cuando hay más aumento de peso en la mamá. Presión alta o problemas de azúcar son frecuentes". Dependiendo de cada caso, explica Lara, se receta Omega 3 para fortalecer el sistema nervioso del bebé.
Las inyecciones para la maduración pulmonar no están indicadas si no existe una condición que pueda producir un parto prematuro. Muchos doctores, basados en su experiencia, prefieren colocar esteroides. "Las ventajas es que previenen la hemorragia cerebral e intestinal del bebé y las desventajas es que algunas madres pueden padecer de supresión suprarrenal".
UNA VEZ QUE NACE
Amadeo Leyba, pediatra y presidente del Hospital de Clínicas Caracas, es un "evangelizador" en Venezuela sobre las pruebas médicas que se le deben hacer a los recién nacidos para garantizarles una vida de calidad. La experiencia lo ha llevado a recomendar estudios que considera fundamentales, pues su diagnóstico temprano marca una diferencia abismal: el de la audición y el del perfil metabólico.
"En el caso de la audición, si se detecta que el niño tiene problemas se puede estimular y evita, en 90% de los casos, la sordera a futuro. Algunos niños nacen sin potencial auditivo, en esos casos las primeras semanas son determinantes para su recuperación, si el diagnóstico se hace al año es difícil recuperar la parte auditiva con estímulos".
Algunas clínicas venezolanas hacen este examen como rutina. En otros países, como Canadá, Estados Unidos y los europeos, son obligatorios este tipo de pruebas. "Probablemente mucha gente que analiza estadísticas dirá que se va a detectar un caso por cada 3 mil niños. Con eso es suficiente porque ese niño es el mundo para sus padres", dice Leyba.
El otro estudio importante es el perfil metabólico del neonato. Incluye seis perfiles. "Se analiza una muestra pequeña de sangre tomada del talón. Si hay algún resultado patológico, corregimos el problema metabólico o evitamos que la falta de la enzima dañe el organismo". El médico apunta que los costos de estos exámenes son muy bajos, si se comparan con los beneficios obtenidos.
oespinoza@eluniversal.com
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