El diplomático se perfila para adquirir una posición más férrea frente a las relaciones que mantiene Estados Unidos con Venezuela y Cuba
Los cambios en el tablero de juego de la administración de Donald Trump en Estados Unidos continúan después del despido de John Bolton como Asesor de Seguridad Nacional, con el nombramiento de Michael Kozak, un diplomático de 'línea dura', al mando de la Subsecretaría de Estado para el Hemisferio Occidental (América Latina).
El funcionario, previamente responsable de derechos humanos del Departamento de Estado, llega al cargo en sustitución de la diplomática Kimberly Breier, que renunció por "motivos personales" el pasado 8 de agosto. Este anuncio fue realizado por la portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus.
"El embajador Michael G. Kozak estará asumiendo el rol de jefe de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos. El embajador Kozak es un experimentado defensor de los valores estadounidenses y los derechos humanos, con un profundo conocimiento de la región. Continuará promoviendo la restauración de la democracia al pueblo de Venezuela", informó Ortagus en su cuenta de Twitter.
La designación se produjo apenas un día después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, despidiese al Asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, ante múltiples desacuerdos por su gestión en política exterior, concretamente debido a que se "extralimitó" con la situación de Venezuela.
Además, ocurre unas horas después de que Trump aclarase que Bolton lo "contenía" en lo que respecta a la relación con Venezuela, y que su postura sobre el gobierno de Nicolás Maduro y sobre Cuba sería más dura que antes.
"Mis opiniones sobre Venezuela, y especialmente Cuba, eran por mucho más fuertes que las de John Bolton ¡Me estaba conteniendo!", dijo el mandatario.
Nueva postura con Kozak
En línea con lo que declaraba Trump, parece que Kozak se perfila para adquirir esa posición más férrea frente a las relaciones que mantiene Estados Unidos con Venezuela y Cuba. Como jefe de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, nombre con el que se engloban los estados americanos, la mayor parte de su trabajo estará enfocado en América Latina, con especial énfasis en el conflicto político venezolano y el apoyo del gobierno cubano.
El funcionario tiene trayectoria, especialmente en lo que respecta a Latinoamérica, pues se encargó de las negociaciones para acabar con el régimen de Manuel Noriega en Panamá durante los años 80'. Al ser incapaz de conseguir un acuerdo, dio el ultimátum al gobierno panameño antes de que Washington decidiera intervenir militarmente.
En 1980 fungió como Encargado de Asuntos para Cuba, con una política rígida frente a la inmigración de cubanos que huían en botes hacia Estados Unidos. El diplomático puso varias opciones sobre la mesa para lidiar con esta situación, entre las cuales incluyó el prohibir la entrada.
También tuvo voz y voto en algunas decisiones frente al gobierno de Mauricio Pinochet en Chile, y ayudó a formar las 'Contras', grupos armados financiados por Estados Unidos para enfrentar al gobierno revolucionario del Frente Sandinista de Liberación Nacional.
Tomada de: TalCualDigital
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