Dubraska Padrón es el nombre de la agresora de Guaidó que se presentaba como "comisaria política" de Conviasa. La mujer se hizo famosa, en Venezuela y el mundo, después de que agredió al presidente de la Asamblea Nacional cuando regresó al país de la gira que lo llevó a Europa, Canadá y Estados Unidos, y tuvo que soportar un "comité de recepción" aupado por el jefe de seguridad del Aeropuerto Internacional de Maiquetía, que se dio a la tarea de increpar y atacar al dirigente opositor.
Padrón fue una de las protagonistas de esa agresión, la que le echó agua encima a Guaidó, y lo persiguió desde el área de Migración hasta la zona pública. Los cinco minutos de fama provocaron que alguien irrespetara la intimidad de Padrón y lograra -quien sabe por cuáles medios- acceder a imágenes del ámbito muy privado de la "comisaria", las cuales fueron difundidas por las redes sociales.
Lo anterior provocó que "la moral y las buenas costumbres" de algunos integrantes del cogollo gobernante entraran en acción y decidieran despedir a Dubraska Padrón, a pesar de ser la agresora de Guaidó. El resto de los que increparon al líder opositor, a quienes nadie les hackeó sus cuentas -por ahora-, fueron premiados con productos de la línea blanca, algo que también le hubiera tocado a Dubraska de manejar con mayor seguridad sus dispositivos digitales.
Es inaceptable que a cualquier persona le hackeen sus cuentas, es inaceptable que las fotos íntimas de cualquier persona sean tomadas por cualquier degenerado y publicadas en las redes sociales. Es inaceptable que por esta razón hayan despedido a Dubraska, como también es inaceptable la conducta de Dubraska en Maiquetía. Es inaceptable que al resto los hayan preamiado.
Tomada de: TalCualDigital
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