GERMÁN GUÍA CARIPE[1] / IDEAS EN LIBERTAD 15MAR2020
El artículo forma parte de la obra Del autoritarismo a la democracia. La experiencia polaca, un libro colectivo, traducido del polaco al español y al portugués, coordinado por varios juristas polacos, conformado por diez y seis capítulos escritos por académicos vinculados al estudio del autoritarismo, totalitarismo y democracia en la Polonia de Europa Central, durante la órbita soviética tutelada por Moscú hasta la actual Polonia (2014).
La obra es prologada por Lech Walesa, líder del Movimiento Solidaridad de Polonia, y da continuidad a su labor a través de los acuerdos de la Mesa Redonda y las elecciones del 4 de junio de 1989, dos piezas del engranaje de aspiraciones hacia la libertad de los polacos.
Los ejes transversales de este esfuerzo intelectual se enmarca dentro del trabajo del Instituto Lech Walesa, primera organización sin fines de lucro en Polonia, fundada en diciembre de 1995. Esta institución de carácter apolítico desarrolla actividades como conferencias, seminarios, conversatorios, proyectos editoriales entre otras realizadas en Varsovia y el extranjero.
La democracia en Polonia tuvo su génesis con fuerte dolores de parto para desplazar al sistema colectivista marxista-leninista. En eso, consistía el eje central de la fuerza de Solidaridad[2], ejemplo que debe ser el faro que guie para resolver los problemas de los países y de los ciudadanos que todavía sueñan con una vida en libertad.
La nota introductoria del doctor Bogdan Szlach, nos habla de una Polonia: un país situado en Europa Central. Luego de una serie de apartados relacionados con el tránsito hacia la democracia de ese país (1956-2014), se incluye el estudio del sistema de poder de la República Popular de Polonia, elite y partidos políticos, los cambios sociales, la participación de las mujeres así como el papel fundamental de la iglesia católica polaca, entre otros puntos que sirvieron de empalme a esta transición.
El Autoritarismo y totalitarismo: aspectos teóricos a cargo del politólogo polaco Marek Bankowicz[3], tiene como línea de investigación los sistemas políticos y constitucionales, los regímenes democráticos no democráticos y sus razones ideológicas. En el apartado, se vincula como ha sido estudiado a partir de las teorías políticas el autoritarismo y el totalitarismo.
El autoritarismo es visto como un fenómeno de carencia democrática, también, como un término despectivo. No obstante, Bankowicz (2014) detalla al autoritarismo como algo fundamentalmente adverso del totalitarismo. El poder autoritario se satisface solo con tener el poder, y el objetivo de su aspiración es únicamente gobernar en sentido político. El coautor se pasea en la concepción del autoritarismo que maneja Juan José Linz, sus rasgos característicos, distinción entre los siete tipos de autoritarismo para finalizar con los cuatro tipos de sistemas no democráticos (democracia oligárquica, caciquismo, caudillismo y sultanismo moderno).
Bankowicz señala que un sistema autoritario existe o existirá siempre y cuando permanezca la fuerza (policial) que lo apoya; cuando ella se quiebra por diversos factores, el modelo es condenado al fracaso.
Para explicar el totalitarismo parte de su definición como sistema político, en el que todos los comportamientos sociales están controlados por la supremacía del poder estatal arbitrario que instaura una visión ideológica cerrada, que entra en vigor por medio del terror utilizado a gran escala[4]. El politólogo polaco se pasea por la teoría totalitaria a través del fascismo italiano, nazismo alemán y el estalinismo soviético. También se refiere al fundamentalismo islámico, como los ayatolas iraníes y los talibanes afganos. El terror en el totalitarismo no solo se concentra en defender y apoyar un régimen político, sino que se convierte en el método preferido de gobierno.
Al considerar el totalitarismo como un fenómeno que se consolida en el siglo XX, lo expone como una simbología del mal político, paseándose por la visión clásica del fascismo italiano que maneja Giovanni Gentile, explicando además la forma como lo presentaba el ministro de propaganda Goebbels en la Alemania del III Reich, bajo el concepto de Estado total de fuerza del alemán Carl Schmitt.
Es importante recordar que después de la SGM (1938-1945), los estudios sobre el totalitarismo se hacen muy populares en las ciencias políticas. En las cuartillas que desarrolla Bankowicz, se enfatiza en los estudios tradicionales de Hannah Arendt, Carl J. Friedrich, Zbigniew Brezezinski, Raymond Aron y Giovanni Sartori, este último da una nueva perspectiva de cómo evolucionan los modelos totalitarios.
El autor expone que tanto en el fascismo como en el comunismo se concentran todas las características fundamentales del totalitarismo: ideología oficial estatal; gobierno de monopartido; principio del jefe único y terrorismo masivo aplicado a la sociedad. Cierra su apartado con una gran interrogante sobre su natal Polonia de la postguerra gobernada por el colectivismo soviético, ¿es un Estado autoritario o totalitario? Concluye así que el sistema político polaco, entre 1956 y 1989, se ajusta a la categoría de análisis (según J.J. Linz), como un autoritarismo pos totalitario o “la barraca más alegre del Bloque Oriental”[5].
Referencias
[1] Profesor Asociado a Dedicación Exclusiva de la Universidad Simón Bolívar en su Sede del Litoral, perteneciente al Departamento de Formación General y Ciencias Básicas del Área del Pensamiento Crítico. gguia@usb.ve
[2] Solidaridad o Solidarność es un sindicato no gubernamental, comenzó sus actividades libertarias en agosto de 1980, los astilleros navales de Gdańsk, Polonia donde Lech Wałęsa junto a otras personas fundaron esta agrupación en un país controlado por el Bloque Soviético, bajo las directrices de Moscú, que dio lugar a un simpático movimiento social anticomunista. Logró reunir más de 10 millones de miembros, entre los participantes se encontraban muchos fieles a la Iglesia católica polaca, que contribuyo a socavar las bases la caída del colectivismo marxista en Polonia. Solidaridad se caracterizó por promover la no violencia en las actividades de sus miembros o asociados.
[3] Bankowicz es politólogo graduado de la Universidad Jaguelónica de Cracovia, vicedecano de la Facultad de Estudios Internacionales y Políticos de la citada Universidad y Director del Departamento de Sistemas Políticos Contemporáneos de la Universidad Jagueónica.
[4] Bankowicz, ob.cit., p. 26.
[5] Ibídem, p. 35.
Tomada de: Ideas en Libertad
No hay comentarios:
Publicar un comentario