Ernesto Villegas visitó la sede del MAS, pero ya no como el reportero que fue en otros tiempos, sino para reunirse el pasado viernes con una parte de la dirección de ese partido y con su presidente, Felipe Mujica, quien anda en una prédica contra la polarización
Ernesto Villegas era un visitante semanal a la casa nacional del Movimiento al Socialismo. Lo hacía en su condición de reportero de la fuente política, en la cual se desempeñó en los diarios El Nuevo País, Economía Hoy y El Universal.
En la sede naranja, ubicada en la caraqueña urbanización Las Palmas, esperaba como todo reportero a la salida del vocero masista para conocer la posición de ese partido sobre el acontecer político del país.
Hace tiempo que Villegas dejó de ser reportero. Ahora se reconvirtió en un convencido militante del autoritarismo en el poder, aunque de vez en cuando deja ver rasgos de su anterior carácter, cuando era una persona que lucía sensata y equilibrada, lejana a los extremos políticos.
Tal vez tratando de recuperar esa condición volvió este viernes por los predios de la referida sede masista. Por allá lo vieron cerca de las 10 de la mañana. También vieron al presidente del MAS Felipe Mujica, quien anda en una prédica contra la polarización, prédica que nos parece positiva.
Lo que no cuadra en el encuentro es la presencia de Villegas, a menos que sea contrario a la línea oficial que está imponiendo el maduro-cabellismo de tensar la cuerda hasta lo máximo posible, sin descartar romperla.
No sabemos cuál fue el resultado del encuentro, pero deseamos que sea un paso para que la polarización ceda. Aunque también puede ser un paso para que el muy disminuido MAS se incorpore al Gran Polo Patriótico. Los hechos serán los que hablen.
Cort. TalCualDigital
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